jueves, 12 de noviembre de 2009

loros agapornis y sus crias


Descripción: Tienen un tamaño de unos 15 centímetros. Tengo ejemplares de coloraciones: ancestral, diluido, portador de panaché y azules.
Cría: La hembra lleva el material al nido. Hay que proporcionarles ramas de palmera, de sauce, de olmo, de bambú, de frutales y papiros para que acomoden el cajón-nido que se les pone. Éste tiene unas medidas de 20 x 20 cm de base x 25 cm de altura. Las parejas formadas por fischer x roseicollis (o personata x roseicollis) criarán sin mayores problemas, pero, según se especifica en la literatura especializada, las crías que salen de tal cruce son estériles y no se pueden utilizar como fines reproductivos. Difieren de un agapornis normal en que la mejilla rosa del roseicollis está manchada de negro. En teoría aunque pongan huevos o pisen a sus parejas, no es posible que críen. Las parejas fischer x personata son viables y sus descendientes sí son fértiles, no obstante, hay que evitar este tipo de cruces para intentar mantener puras las diferentes especies, pues pese a que los fischer y los personata son 2 subespecies dentro de la misma especie (hay confusión con esto, pues hay quien afirma que son dos especies distintas: Agapornis fischeri y Agapornis personata, y hay quien afirma que son dos subespecies de la misma especie: Agapornis personata fischeri y Agapornis personata personata), los cruces dan pájaros que son una media entre las dos, se asemejan a fischer, pero con la cabeza un poco más negra, aunque depende mucho del pollo, pues yo he criado con parejas formadas por un fischer y un personata y había pollos que eran indistinguibles de un fischer normal y otros que tenían la cabeza notablemente más oscura que los fischer. No obstante, lo dice un pecador, no hay que realizar este tipo de cruces, y, de salir pollos hibridados, no hay que utilizarlos para la reproducción. Hacen un nido semiabovedado, muy relleno con hojas y otros materiales, y la inspección normalmente se puede realizar sin demasiados problemas. Mantengo a todas las parejas de agapornis criando en colonia juntas, una vez establecidas las parejas por especies (lo reitero: hay que evitar siempre los hibridamientos entre especies) Lo mejor sería separar cada especie a una pajarera, pero por falta de espacio me es imposible. Así pues, lo que he hecho durante el 2004 ha sido establecer las parejas de cría fuera de la pajarera, manteniéndolos separados por especies en grandes jaulones (Varias aves de la misma especie, así se evita en la medida de lo posible las incompatibilidades entre aves y a las aves se les da a elegir un compañero que sea de su misma especie). Una vez que la pareja había quedado establecida (criando una vez en el jaulón) procedía a soltarla en la pajarera. No he tenido todavía ningún problema de hibridamiento siguiendo este método, y las parejas resultantes están criando polluelos sin problemas. Las crías de los A. fischeri tienen la piel de un tono mucho más rojizo que las otras especies de agapornis, por lo que puede haber problema si pasamos algún pollo de Fischer a un nido de roseicollis, cuyos pollos son más claros (al utilizarlos como nodrizas si hay algún problema en la pareja original), pues los roseicollis no parecen reconocer los pollos de fischeri.

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